Factores de Riesgo
Un factor clave que hace que la población infantil y adolescente, en particular las niñas,
sea vulnerable a la violencia (y que aumenta la probabilidad de que los niños varones y los
hombres inflijan esa violencia) es la tolerancia social, tanto de la victimización de las niñas
como de la agresión por parte de los niños y los hombres. Con frecuencia, este abuso o
explotación se percibe como normal y fuera del control de las comunidades lo que, unido
a la vergüenza, el temor y la creencia de que nadie puede ayudar, hace que los niveles de
denuncia ante las autoridades sean muy bajos. Además, las víctimas a menudo se culpan
de la violencia que sufren. Esta tolerancia social de la violencia en general, y de la violencia
sexual, proviene de la situación de inferioridad de las mujeres,
las niñas y los niños en muchas sociedades, así como de las normas culturales en torno al
género.
Algunos de los factores de riesgo en los que afecta la violencia infantil:
• A nivel individual incluyen aspectos biológicos y de la historia personal como sexo,
edad, educación, ingresos, discapacidad, desarrollo cerebral y cognitivo deficientes, trastornos psicológicos,
consumo nocivo de alcohol, abuso de drogas y antecedentes de agresión o maltrato.
• A nivel de las relaciones interpersonales estrechas incluyen la carencia de vínculos
afectivos, las prácticas de crianza deficientes, la disfunción y separación familiar, influencia hacia grupos de delincuentes, ser testigo durante la niñez de violencia contra la madre o madrastra, y el matrimonio
precoz o forzado.
• A nivel de la comunidad incluyen todas aquellas características de los entornos como
las escuelas, los lugares de trabajo y las comunidades que aumentan el riesgo de violencia. Entre estas
características se encuentran la pobreza, la alta densidad de población, las poblaciones de paso, la baja
cohesión social, los entornos físicos peligrosos, los índices altos de delincuencia y la existencia de comercio
local de drogas.
• A nivel de la sociedad incluyen normas legales y sociales que crean un clima en el
que se fomenta la violencia o se considera como algo normal. Estos factores también abarcan las políticas de
salud, económicas, educativas y sociales que mantienen las desigualdades económicas, de género y sociales;
la protección social inexistente o inadecuada; la fragilidad social debido a un conflicto, desastre natural o
situación luego de un conflicto y la aplicación inadecuada de las leyes.
Aylin Rivas